La biblioteca de Babel

La biblioteca de Babel

En pocas palabras

¿Qué harías si estuvieras encerrado en una biblioteca durante horas, todos los días, sin nada que hacer? Pues bien, si fueras el escritor argentino Jorge Luis Borges, escribirías algunos de los cuentos más influyentes de la historia de la literatura americana (y con "americana" nos referimos a toda América; es decir, a todo el hemisferio oeste). Verás, Borges era un bibliotecario demasiado bueno, tanto, que sus compañeros se quejaron de que los hacía quedar mal. De modo que el autor se acostumbró a terminar rápido su trabajo y a pasar el resto del tiempo escribiendo historias en el sótano. Una de ellas, "La biblioteca de Babel", fue publicada por primera vez como parte de una colección de relatos en español en 1941. La versión inglesa no vería la luz hasta 1962.

La prosa aguda y las ideas enrevesadas que componen estas historias, sirvieron de inspiración para los escritores que pertenecieron al boom de la novela hispanoamericana de la década de 1960, e influyeron sobre premios nobeles como Gabriel García Márquez, José Saramago y J. M. Coetzee. Borges era un escritor tan prolífico y tenía un estilo tan característico, que se comenzó a emplear el término "borgeano" para designar una idea abstracta, metafísica y descabellada. Sí, se creó un adjetivo en su honor. (Tenemos que admitir que estamos un poco celosos).

"La biblioteca de Babel" tiene lugar en… ¡correcto!, una biblioteca. No tiene muchos personajes, ni siquiera una verdadera trama, pero la magnificencia de su concepto suple con creces esa falta de acción. La premisa es la siguiente: la biblioteca de Babel es una biblioteca "total" que contiene todas las combinaciones de letras posibles. Esto significa que alberga todas las obras literarias jamás escritas, todo lo que todavía no se escribió y también un sinfín de textos incoherentes.

Borges toma la idea del escritor alemán de ciencia ficción Kurd Lasswitz y, cuando la plasma, nos hace reflexionar sobre todas las implicaciones de la biblioteca total hasta que nos comienza a doler la cabeza. El resultado final es un tanto inquietante, ya que parece predecir el concepto en el que se basa Internet, el cual podemos definir como una especie de "biblioteca total" digital que contiene a partes iguales información valiosa e inservible. Es en parte gracias a este relato que muchos críticos consideran a Borges una especie de profeta de la era de Internet. (Echa un vistazo a este artículo del New York Times sobre el libro Borges 2.0, que explora algunas de las formas en las que Borges predijo la idea de un sistema global digital como el que tenemos en la actualidad).

Podría decirse que "La biblioteca de Babel" es el cuento más famoso de Borges, en parte porque es un clásico ejemplo de su obra y de las ideas que amaba. Borges escribía a menudo sobre conceptos complejos como el infinito, la naturaleza de la realidad y laberintos, y todos esos elementos aparecen plasmados en este relato. Sin embargo, puede que la popularidad de este cuento también se deba al hecho de que es fácil vincular al narrador, un bibliotecario anciano y casi ciego, con el propio Borges. El escritor, considerado una celebridad, y querido no solo en su Argentina natal, sino también en el extranjero, perdió la vista por completo el mismo año en que lo nombraron director de la Biblioteca Nacional de Argentina.

Esperamos que disfrutes de Borges y su biblioteca.

¿Y a mí qué?

¿Qué decir sobre la biblioteca? Lo cierto es que a nosotros nos encanta, es uno de nuestros lugares favoritos. ¿En qué otro sitio se puede disfrutar, al mismo tiempo, de WiFi gratuito, los últimos bestsellers, y la compañía de lindos y estudiosos muchachos (y muchachas) con lentes de pasta? Está bien, está bien, tenemos que admitir que no todo el mundo sueña con estar rodeado de libros, pero podemos decir sin miedo a equivocarnos, que cuando llegan los exámenes finales, la biblioteca es el mejor lugar donde pasar tu tiempo. Si todavía no comenzaste el trabajo de diez páginas sobre la Revolución Americana que debes entregar mañana, puedes trabar amistad con los bibliotecarios (siempre que nosotros sigamos ocupando el puesto número uno en tu lista de mejores amigos).

Por otro lado, debemos reconocer que estudiar en la biblioteca puede llegar a ser un poco molesto al cabo de un tiempo. A veces no es fácil hallar la información que buscas; en ocasiones la luz fluorescente le da a tu piel de un tono pálido muy poco saludable; y más de una vez, los murmullos de tus compañeros de estudio te dan ganas de gritar con todas tus fuerzas. Es decir, a veces da la sensación de que hubiera sido mejor quedarse en casa.

Antes de que empieces a descargar tu ira sobre nuestra institución pública favorita, piénsalo de esta forma: podría ser peor, mucho peor. En el relato de Borges, la biblioteca no es un edificio en el que puedes disfrutar de aire acondicionado, una cafetería y un grupo de lectura. No. La biblioteca lo abarca todo. Es infinita. Engloba todo el universo.

Y en caso de que estés pensando que la Biblioteca infinita de Borges suena como el paraíso de los devoradores de libros, permite que te proporcionemos unos cuantos datos bastante deprimentes: la iluminación es mala, el sistema organizativo es un desastre, y la mayoría de los bibliotecarios se suicidaron. Ah, sí, se nos olvidaba, no puedes leer ninguno de los libros.

La Biblioteca de Borges es una pesadilla para cualquier bibliotecario, es aterradora y fascinante al mismo tiempo. Además, hace que nos sintamos agradecidos por contar con el sistema decimal del bueno de Dewey.

Frase Clave

"El universo (que otros llaman la Biblioteca) se componte de un número indefinido, y tal vez infinito, de galerías hexagonales." (1)